II X-TREME S. ANTONIO DE ETXEBARRI (1/12/2013)

Ya hemos entrado en el mes de diciembre y hoy he participado en una nueva carrera de montaña que está incluída en el I Basahuntza Trail Zirkuitoa Nerbioi-Ibaizabal.   Así que esta es mi 17ª carrera del año y la 6ª de montaña.

Perfil de la carrera.

El día anterior a la carrera, siempre hago el mismo ritual.  Sacar toda la ropa-equipaje que necesito para correr en la carrera y revisar que nada se me olvide.  Lo coloco todo a la vista y así localizo mejor todos los elementos a llevar.  Luego preparo una mochila con todo lo relacionado para el aseo y la ropa de recambio para volver a casa.

Equipaje.

A la mañana he desayunado bien de vitaminas y un poco de Apiserum para tener energía suficiente para la carrera de hoy.

Momento desayuno vitamínico.

Después del desayuno contundente, me he vestido y he salido de casa a las 9:30 con el coche, con la intención de llegar a Etxebarri a eso de las 10, para buscar un buen sitio donde aparcar lo más cerca posible del Polideportivo.  Pero ésto no ha sido posible porque me he guiado por el gps para llegar a mi destino y al mandarme a ir por una carretera de peaje, me he desviado y he pensado que ya me redireccionaría para ir hasta el lugar de la carrera.  La cuestión ha sido que al final "me ha salido rana" el cambio y yendo por la carretera de Enekuri me ha llevado hasta Deusto.  He estado dando vueltas por Deusto y alrededores durante más de 20 minutos desesperándome cada vez más porque está claro que soy muy torpe y el gps no me ha servido de mucho.  ¡¡¡Anda que no he jurado en hebreo y arameo!!! jajajaja.....

A las 10:35 h.  he llegado por fin a Etxebarri y un amable policía municipal me ha indicado que buscase sitio más arriba porque la zona del polideportivo estaba ya llena de coches y autocaravanas.  Al final me he buscado la vida y he conseguido aparcar relativamente cerca de donde comenzaba la carrera.

Bajo del coche y cojo mi mochila y me acerco al polideportivo, cuando paso al al lado de una furgoneta y un chico que me ve llegar me dice:  Aupa Yolanda!!!  Y yo, que todavía no me acostumbro a que la gente me reconozca, le pregunto que a ver si era Iosu, el que corre canicross y a su respuesta afirmativa, nos saludamos con un abrazo y muy alegremente.  La verdad es que este amigo del facebook, me había comentado por mi muro el día anterior que iba a ir a la prueba y que ya tenía ganas de conocerme en persona, jajaja.... ¡¡¡Y yo, encantada vamos!!!   Así que estuvimos un ratito charlando y quedamos en vernos más tarde por el área de competición o llegada.

Luego, fui a recoger el dorsal y a dejar la mochila en el guardaropas que dispuso la organización en el frontón que está en el polideportivo.   Me preguntaron qué talla de camiseta quería y les dije que por supuesto la S, que la "operación trikini"  había funcionado muy bien, jajaja....  Me dieron una bolsa con la camiseta, una gorra de visera bien bonita de color rojo, el dorsal 434, y una pegatina con el mismo número para dejar la mochila identificada, además de una barrita energética y unos clips especiales y personalizados para enganchar el dorsal a la camiseta.  Consigo ponerme el dorsal con un poco de ayuda de un hombre de la organización y dejo la mochila en el frontón, avisando de que volvería más tarde a dejar la chamarra porque hasta las 12:15h. que empezaba la carrera no era plan de andar cogiendo frío por allí.

Aquí estoy con mi gran amigo Pablo San Juan previa a la salida.

Luego, empecé a dar vueltas por la zona de salida-meta y me encontré con cantidad de amigos que corrían la carrera de a pie y con todos estuve charlando y echando risas.  La verdad es que el ambiente previo y posterior de las carreras es una verdadera gozada.  Yo disfruto muchísimo de esos momentos.

Se acerca la hora de la salida de la carrera de canicross y me acerco a verla y a sacar alguna foto y me encuentro con otro amigo del facebook, Pablo Samaniego que al verme me reconoce enseguida y nos damos dos besos y quedamos luego en estar un rato y charlar.

Me hice fotos con muchos amigos, porque cada vez que me ven, ya saben lo que hay, jajaja.... ¡¡¡Los tengo abrasados a los pobres!!!  Pero al final, luego, cuando les mando las fotos, todos se ponen muy contentos. Además tengo un truco infalible que hasta ahora no ha fallado, jajaja....  Cuando hay alguno que se resiste un poco al tema fotográfico, ya sea por vergüenza, apuro o porque no le va mucho la historia, yo siempre suelto esta frase y que además es verdad, es digo: "A ver si voy a tener fotos, con Kilian Jornet, con Miguel Heras, con Iker Karrera, y otros "pros" y no voy a tener contigo, eso ¡¡¡no puede seeerr!!!"   Así que les entra la risa floja y al final acceden, jajaja.... Y yo se lo agradezco en el alma, esa disposición que muestran finalmente.

Super equipazo Otsoak Trail Miribilla en el cual tengo el gusto de estar integrada como una más.
(chica), Iñigo, Iker, yo, Juan Miguel, Sandra, Richard, Santy, Imanos, Pablo y Esti.

Los integrantes de Ubietamendi Taldea se apuntan a un bombardeo,
jajajaja.... Iñigo y yo de infitrados, jajaja....

Otra makina más entre mis amigas, Leire.  ¡¡Hizo 4º puesto!!

Aquí estoy con mi vecino Oscar y sus amigos, que nos hicímos
esta foto en plan guerra para animarnos para la batalla del barro.

La verdad es que tengo debilidad por los "kinkis"
¿No se nota? jajajaja... ¡¡¡Son super majos!!!

Aquí estoy con estos makinas: Alberto y Jesus. ¡¡A ver si se me pega algo!!

Más amigos en Etxebarri.  Alberto, Jesus, Iñaki y un anónimo.

Aquí estoy con estos fenómenos que son Jose Miguel, Unai
e Isaac, que se hacen llamar "los kinkis", jajaja...
Pero son de los buenos, eh?

Momentos previos a la carrera con mis amigos
Julen y Artiz, que siempre me aportan alegría.

Se va acercando el momento de la salida de la carrera de montaña y voy a todo correr a dejar la chamarra en el frontón.  Luego salgo y empiezo a calentar ya las piernas porque la verdad es que las tenía un poco duras entre el frío que hacía y que estaba con las mallas finas, aunque arriba iba bien abrigada.

Deseo mucha suerte a todos los amigos que me voy encontrando mientras voy adentrándome en el tropel de corredores que se empieza a amontonar bajo el arco de salida, controlo que mi reloj-pulsómetro esté con el pgs encontrado y activo y enseguida dan la salida.

Empiezo a trotar entre todos los corredores, a ritmo ligero pero sin apretar mucho, ya que sabiendo cómo se me disparan las pulsaciones, no quería empezar mal la carrera.  Pensé para mis adentros "de menos a más" y bueno, no sé si lo conseguí pero la verdad es que para empezar la carrera había que subir una buena cuesta de hormigón que iba adentrándose en el monte.

Pasamos primero por la Avda. San Antonio, que ya tenía un poco de pendiente para que entrásemos todos los corredores en calor desde el principio y luego seguir por el barrio Kukullaga, donde empezaba la pista de hormigón.

He de confesar que debido al condicionamiento psíquico que me dan los pitidos de mi reloj-pulsómetro Garmin, cuando me marca si me he pasado del tope de pulsaciones máximas, hace unos días decidí quitar todas las alarmas de aviso.  También las de distancia, vueltas, etc. para no tener que ir pendiente y agobiada del reloj, que aunque hace perfectamente su misión, a mí me descentra de la carrera y los entrenos.  Todo esto viene a cuento de que cuando tan sólo llevaba unos 650m. de recorrido y una altura ganada de tan solo 25 m. de desnivel ya me había pasado de las pulsaciones máximas.  Hasta que no llegué a casa y miré el track no fui consciente de que había llegado a 155 ppm. en esos momentos y eso para mí, significa pasarme de rosca, jajajaja...

Sigo ganando altura y las pulsaciones siguen altas, pero como no me preocupo de este detalle sigo corriendo a paso pequeño pero sin pararme lo más mínimo.  Incluso voy pasando a otros corredores que en esa pendiente deciden ir andando.

A partir del kilómetro 1,2 ya por fin nos adentramos todos los corredores en terreno natural y entonces es cuando empiezo a disfrutar más aún de la carrera, ya que la primera parte hasta ese momento me había resultado un poco pesada.

Zigzagueamos subiendo durante unos 2,5 km por los bosques que tenían bastante humedad y que gracias a la carrera previa de canicross celebrada una hora antes nos había dejado los caminos con el barro bien amasado para el deleite de nuestros pies, jajajaja.....

Primeras subidas en el barro.  ¡¡Menos mal que llevaba unas buenas zapatillas!!

Seguidamente hay unos tramos de sube y baja que hacen que las piernas se vayan poniendo "a tono" y bien duras, jajaja.... Y en el kilómetro 5,7 aproximadamente, entro en una zona con conos en la que de repente empiezo a ver bajar a los corredores que iban en cabeza  ¡¡¡Qué ilusión!!!  Me iba a cruzar seguramente con muchos amigos y les iba a poder saludar.

Así fue,  mientras subía como podía, iba fijando mi mirada a lo lejos para identificar a mis amigos y compañeros de carrera y empezarles a dar gritos de ánimo llamándolos por su nombre, jajaja.... A algunos les canté la canción esa que dice "¡¡¡¡Ese.......cómo mola se merece una ola ooooeee!!!!"  y como pasábamos tan cerca unos de otros, yo estiraba la mano para chocar las palmas con los que bajaban y fue una gozada ver que todos correspondían con sus manos chocando en la mía y animándome y dándome las gracias.   Para mí ese fue el mejor momento de la carrera.  200m. aproximadamente de emocionantes instantes.

Después, ya en el kilómetro 6 de la carrera, el camino de los que subíamos en cola de carrera y los que bajaban en cabeza se bifurcó y se acabó la fiesta ¡¡¡Oooohhhh!!! 

Continúo subiendo por la senda marcada perfectamente por la organización de la carrera hasta el punto más elevado del circuito, 356m. de altura.  Ya, seguido de ahí, empiezo a bajar, intentando coger más velocidad si cabe para ir viendo si era posible hacer un tiempo por debajo de la hora y 30 minutos que había calculado yo que podría hacer.  Esto sin tener ni idea del recorrido, ya que por los problemas de la rodilla lesionada no pude entrenar por la zona.

En el kilómetro 7,5 de carrera, entro de nuevo en la zona de conos por la que hacía unos 13 minutos había visto bajar a los corredores de cabeza y justo en ese momento empezó la rodilla derecha a quejarse y a pinchar un poco.  Yo pensé que iba a seguir al ritmo que llevaba para ver si aguantaba, pero la verdad es que me pegaba un latigazo por alrededor de la rodilla y hacia atrás que ya me estaba empezando a preocupar.

Mientras seguía bajando de altura, miré una vez hacia atrás y no ví a nadie más que a un chico a lo lejos y pensé que iba de las últimas, pero no.  En el kilómetro 10, tuve que bajar bastante el ritmo porque la rodilla ya me dolía casi como para hacerme parar e ir andando y fue allí cuando me pasaron por lo menos 15 corredores, jajaja.... Me dio un poco de rabia, pues iba pensando que iba haciendo un buen promedio de tiempo y velocidad y al tener que bajar el pistón, iba a pasarme del tiempo que había calculado que podría hacer.

Desde aquí en adelante tuve miedo de fastidiarme de nuevo la rodilla y fui con miedo a pisar de una manera u otra por no sobrecargar más la rodilla de lo que ya estaba y eso al final lo que hizo, fue que me torciese ambos tobillos en unas cuantas ocasiones en las últimas rampas de bajada con tanto barro y piedra escondida bajo él.   Total, que pensé que ya no había remedio y volviendo por el mismo tramo que el que habíamos utilizado de subida, me lo tomé con relativa calma.

Pero, oh, sorpresa!!!  En el kilómetro 11,06 de carrera y después de estar bajando desde el kilómetro 8 aproximadamente,  me vuelvo a encontrar con una subida muy maja que iba de los 137m. a los 180m de altura en unos 310m. del recorrido, así que eso fue brutal para mí.

Pasado el kilómetro 12 del recorrido ya no tenía ganas ni de trotar, pero mi amigo Xavier Karlen Nes que se encontraba de repente por aquella zona, me dio mucho ánimo y me dijo que pisase el lateral de la pista de asfalto, que había suficiente terreno para correr y no machacar la rodilla y le hice caso, pero me dolía tanto que volví inconscientemente al asfalto de nuevo, bajando como pude.

Una vez entrada en la zona de los alrededores del polideportivo, que había que rodear, me acordé de que el año pasado estuve justo allí mismo sacando fotos a los corredores y animándolos con mucha envidia de no poder practicar yo aquél deporte y de repente no sé que me pasó que saqué un punto de rabia y fuerzas y de donde no las tenía y aceleré bastante el paso, intentando entrar en meta con un buen ritmo.  Y la verdad es que pude pasar de un ritmo de 9min/km a otro de 4,20 e incluso a bajar de los 4min/km en el último instante.

Al final, llego a meta con un tiempo oficial de 1h 22m 38sg, así que mi sorpresa fue que había bajado de la hora imaginaria que me había marcado como tope. Puesto 296 de la clasificación general y puesto 21º de la clasificación femenina de un total de 30 participantes.  Muy contenta.  Pero tenía otra sorpresa reservada en la llegada a meta y es que mi amigo Victor, uno de los que organiza la carrera, me dijo que me fuese rápida a ducharme y cambiarme porque tenía trofeo y que iba a subir al pódium como 3ª clasificada en el circuito Basahuntza.  

¡¡¡Llegada a meta y satisfacción total!!!

Yo, para no variar, toda incrédula le digo a ver si estaba seguro que era yo y me dijo que sí, que me daría prisa.    Bueno, bueno!!!   Eso sí que no me lo esperaba yo ni de broma, jajaja... Ahí sí que me dí prisa por ir a buscar mi mochila, ducharme y cambiarme. Creo que lo hice todo en menos de 15 minutos y eso que todo el polideportivo estaba lleno de corredores que estaban por los pasillos del polideportivo cambiándose y me tropecé con muchísimos de ellos, jajaja.... Pero me tenía que dar prisa.

Una vez aseada y cambiada con ropa de calle, salí con la mochila afuera y le comenté a varios amigos que me iban a dar un trofeo toda extasiada, ajajaja.... Todos me felicitaban y me decían que me lo merecía y tal y yo dando las gracias a todos.

Aquí con mis amigos Iosu, su mujer y Pablo.

Dan los primeros premios a los ganadores de canicross entre los que se encontraba mi amigo Iosu, que fue el campeón, luego los chichos, las chicas y para el final dejaron a los ganadores del circuito de carreras, que comprenden: Arrankudiaga-Zollo; X-treme Finaga y Etxebarri X-treme.  Estaba hablando con unos y con otros cuando de repente me llamaron para subir al pódium y yo toda de los nervios le dejé la cámara a mi amigo Pablo Samaniego para que me sacase algunas fotos y subí a recoger el premio, controlando esta vez mucho mejor la emoción, para no estropear las fotos, jajaja.... Luego subió otra chica del club Artunduaga de Basauri y la campeonísima Sandra Sevillano del equipo Otsoak Trail de Miribilla, y que tengo la suerte de ser su amiga y compañera de equipo, aunque yo extraoficialmente, jajaja....

Momento de agradecimiento al público congregado.

¡¡No me pude resistir a bailar en plan go-gó con la
música tan marchosa que pusieron!! jajajaja.....

Aquí, ya muy formal con mi trofeo y mi sobre con 50€ de premio.

Recibiendo a la segunda clasificada.

¡¡¡Fotón para la historia!!!  ¡¡Quién me ha visto y quién me ve!! jajajaja....

 ¡¡Menudo momentazo!!  Estaba que no me lo creía, pero era cierto.  Volvía a subir a un pódium en mi primer año de vida deportiva y de carreras.  Así que contentísima y satisfecha conmigo misma de ver que si quiero, puedo.

¡¡Ya tengo otra copa más para mi vitrina!! 

Foto final para acabar un día espléndido con el equipo Otsoak Trail
de Miribilla, que me han acogido como una más de sus integrantes, por
lo que les estoy realmente agradecida.  Esto me motiva mucho a seguir.

Mil gracias por las fotos a Kepa Itxaurza, que me animó muchísimo durante el recorrido.

Hoy peso: 58,6 kg.

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