miércoles, 1 de enero de 2014

ANDRA MARIKO XXXII . KROSA ITXAS ARGIA (29/12/2013)

Ahora sí que sí!!!  Con esta última carrera en la que he participado, doy por finalizado mi primer año de vida deportiva y de competición en carreras de asfalto y montaña.
Para mí ha sido un año lleno de aventuras, en las que empecé con bastante poca confianza en mí misma, pues no sabía si lo que me había propuesto podría llevarlo a cabo.  

Y la verdad es que echando la vista atrás, me puedo sentir orgullosa y satisfecha de mi insignificante comienzo en el mundo deportivo que poco a poco se ha ido afianzando en mi vida con una fuerza que me tiene "envenenada".  Y todo gracias a la gente fabulosa que estoy conociendo de todos los niveles, incluso de élite e internacional con los que he podido compartir mis inquietudes de novata e inexperta y de los que he aprendido muchas cosas.  Por todo ello, gracias a todas las personas que he conocido por aportarme tanto.

Hoy he corrido en mi carrera número 20 del año.  Sí me llegan a decir a principio de este año que iba a correr en tantas carreras por primera vez, no me lo hubiese creído, la verdad.  Pero así ha sido.  La mayoría han sido de asfalto pero también he tenido el lujo de participar en carreras de montaña que era uno de mis objetivos, a parte de quitarme un lastre de peso haciendo deporte que al final se ha traducido en 23 kg. menos.  Así que muy contenta de lograr ambos objetivos.

Como iba diciendo, hoy era mi última carrera de este año y la verdad es que por ser las fechas que son y teniendo en cuenta que estos días se come más desordenadamente y "peor", aunque algunos dicen que esto de las comidas navideñas es comer mejor, hoy tenía el estómago muy pesado y os cuento porqué.  Ayer tuve cena de amigas de juventud para celebrar la Navidad y para reunirnos y echar unas risas y claro una cosa llevó a la otra, y aunque intenté cuidarme un poco en cuanto a los excesos culinarios, al final me pasé de rosca.  Y en cuanto a horario de llegada a casa, al final llegué a las 3 a.m.

Total, que al despertarme hoy, la sensación era de empacho total y con mucha falta de sueño, pero aún así he decidido ir a la carrera ya que si no fuese hoy, sería la puerta abierta a un sinfín de excusas futuras para otras carreras, cuando me encontrase con algún contratiempo, y eso no puede ser.  ¡¡Si digo que voy, voy!! A no ser que me rompa una pierna o me atropelle un coche o camión y no lo cuente, jajaja.....

La mañana ha amanecido fresca, pero había unas nubes bastante oscuras por el horizonte que amenazaban lluvia o granizo. 

En esta carrera ha participado también mi marido, que poco a poco y como que no quiere la cosa se va metiendo poco a poco en la participación de carreras y como novedad también ha participado mi hermano pequeño que ha venido desde Barcelona para pasar las fiestas navideñas y al que le "engañé" para que se animase a participar.
El "engañado", jajaja...
Hemos llegado pronto y hemos aparcado sin problemas.  Hemos salido del coche abrigados para no enfriarnos hasta la hora de la carrera y nos hemos ido a un bar a tomar un café.
Paseíto de vuelta de tomar el café.
Después hemos ido al punto de inicio de la carrera y hemos estado charlando con algunos amigos del facebook que por allí nos hemos encontrado.  Alguna foto que otra y una vez llegada la hora, todos a la línea de salida con ganas de pasarlo bien.
Foto con los amigos del facebook para el recuerdo.
No me había dado cuenta hasta que me he visto a pocos minutos de la salida, de que se me había olvidado llevar un chuvasquero o cortaviento para abrigarme en la zona que transcurre junto al acantilado de La Galea, pero mi amigo Jesus, me ha prestado muy generosamente un cortavientos de los buenos de Salomon para que lo utilizase.  

A las 11:00 han dado el pistoletazo de salida y todos los corredores apelotonados que estábamos allí hemos salido con ritmo ligero y yo en cuanto he visto algún hueco me he ido metiendo y adelantando a algunos.

Lo que no sabía es que estaba yendo a un ritmo demasiado fuerte para mí y sobre todo para ser el inicio de la carrera. Así que aunque al principio me encontraba bien y con fuerza, según iban pasando los metros e íbamos zigzagueando por las estradas de Andra Mari, con contínuas subidas y bajadas que hacían que el ritmo se frenase o se acelerase a cada momento, mis piernas se iban cargando y los efectos de la cena navideña del día anterior empezaban a asomar.

Malestar general, pero aún así seguía avanzando con decisión.  Hemos llegado a la zona del aparcamiento de la playa Azkorri y allí ha empezado a llover un poco y el viento a empezado a azotarnos a todos los corredores. Menos mal que tenía atado a la cintura el cortaviento de mi amigo Jesus porque la verdad es que lo he necesitado a partir del kilómetro 3 aproximadamente, pues a pesar de ir corriendo, la sensación de frío que tenía en mi cuerpo no era nada agradable.   Así que me lo he puesto con la ayuda de otro corredor y amigo mío de mi club de montaña.

Pero al de poco de abrigarme con el cortavientos, me he empezado a sentir mal y un dolor en el pecho izquierdo me ha hecho finalmente parar unos instantes para a continuación seguir caminando con bastante preocupación y agobio por este dolor en modo de pinchazo y que además ha ido acompañado de una falta de fuerza repentina y un abotargamiento de cabeza y boca seca que me ha dado bastantes pistas de que algo no iba bien y que debía bajar el ritmo sí o sí.

Pues sí.   Lo he tenido de bajar bastante y mientras corría a ritmo muy cansino y sin fuerzas me iban pasando cantidad de corredores conocidos y desconocidos que me animaban para que siguiese un poco más.  No sé que pintas tendría corriendo en ese momento, pero tanto ánimo me indicaba que mi imagen era bastante penosa.

Varios, como Félix, Iñaki, y alguno más se han puesto a mi lado y me han dicho que fuese tranquila con el único pensamiento en acabarla sin más.  Pero yo por mis adentros tenía el pensamiento reiterado de abandonar definitivamente la carrera, pues ya no estaba disfrutando absolutamente nada.  Todo me pesaba. ¡¡¡Hasta las ideas!!!  

He seguido corriendo bastante pausada, perdiendo a mis acompañantes irremediablemente.  Pero más adelante, mi hermano pequeño que se había quedado bastante atrás al principio, me ha alcanzado y gracias a él que me ha ido hablando me he evadido un poco de la carrera en sí y hemos ido avanzando tranquilamente hacia la línea de llegada a la que hemos llegado en unos 49 minutos pasados aproximadamente.

Así que una carrera más en mi haber, pero directamente para olvidarla, jajaja.....

Hoy peso: 59,7 kg.







No hay comentarios:

Publicar un comentario